Si los seres humanos nos agrupamos viviendo en comunidades y nos organizamos para la gestión de las mismas (garantía de superviviencia), es decir, si la necesidad de hacer política es innata (aislados perecemos), participar en el grupo es obligación gustosa. Pago impuestos y participo con acciones concretas que ocupan mi tiempo a diario (Pago y hago por y para la vida).
¿Por qué no lo hacen los ricos?
¿Por qué en tiempos de crisis hay quiénes se enriquecen y el groso de la comunidad se empobrece?
¿Por qué los mínimos:
Casa (techo y abrigo),
Agua y comida (subsistencia),
Atención médica (salud física, mental),
Asistencia y cuidado de los desvalidos, enfermos, ancianos y malitos,
Transmisión de conocimientos (cultura y educación) para que nuestros descencientes puedan resolver en el presente que les toque (el heredado),
Garantías para que la convivencia respete los mínimos acordados en los Derechos Humanos...,
por qué estos mínimos se lo saltan a la torera los gestores políticos elegidos cediéndoselo a los gestores económicos?
¿Por qué hemos permitido que el sector económico sea el que nos domine y postulemos como axioma irrefutable que favorecer su crecimiento, reforzarlo, engrosarlo, pagar sus desvaríos y convertirlo en intocables harán que nos beneficiemos el groso de la población que sufre por su codicia injustificada?
Años ha tenido el sistema que nos mantiene para demostrar que tras tanto tiempo hay
-más pobres en el mundo.
-Que cuando hay desacuerdos, la comunicación se paraliza y se arreglan los temas con violencia: hay más muertos. Contables son aunque no haya estadísticas, ni de ellos ni de sus dolientes que tardarán años en recuperarse.
-Que cuando en un territorio hay tesoros que el sector económico anhela, a sus habitantes se les desespera hasta que sucumben a las maniobras económico-políticas de los avaros.
Ventajas tiene vivir en comunidad y organizarnos políticamente, a sabiendas que por evolución y revueltas, el pueblo ha llegado a ser escuchado y vivimos más y siendo más respetados (léase la Historia descrita por cualquiera de sus expertos -en todas ellas, el pulso de la pincelada es el mismo-).
Ventajas hay, pero ¿en qué nos estamos equivocando?
Reviso mi primera premisa:
Pago y hago por y para la vida.
PAGO: todo lo he reducido a dinero.
HAGO: acciones en el tiempo.
VIDA: la última palabra la tiene siempre el planeta Tierra (sus quejidos por está vivo y no respetarlo, su propia vida inserta en el Cosmos).
¿En qué nos estamos equivocando?
En permitir la CODICIA (por pago).
En permitir que los codiciosos sean los que decidan, manden y manipulen (por hago).
Nos toca remangarnos, sí, remangarnos y trabajar para que los corruptos codiciosos desaparezcan.
De momento, no se debe permitir que los AFECTADOS POR LA HIPOTECA SUFRAN.
¿Qué partido político en las próximas elecciones promete, jura y perjura que va a detener la CODICIA Y LA CORRUPCIÓN DE LOS SECTORES ECONÓMICO, POLÍTICO Y FINANCIEROS?
A ese votaré. Sigo creyendo en la DEMOCRACIA.
Poesía escrita en el 2006 (Micromundo con melena), antes del anuncio de la crisis (se veía venir, ¿por qué nos callamos? Porque estábamos pillados por las deudas y nos engañaban los financieros: compra, hipotécate que tienes cincuenta años para pagarnos. Los banqueros y bancarios SÍ TENÍAN conocimiento de la existencia de la BURBUJA INMOBILIARIA. ¡A ver quién es capaz de meterles mano!). Haced con mis textos, con lo que hay en Internet mío, lo que queráis. Si algo de lo que hago quita hambre, bien está. Mil besillos. (silvia)
Creo en la política:
Ilusión más que remedio.
Camino políglota que ora con el amo: el dinero.
Cero en política:
Oquedad que desbarata
Y espero que lo inesperado la mute
“Huecos del camino a rellenar de ópticas”.
Mientras los banqueros se ponen las botas...
.
Obligados a callar aunque participemos:
Simulamos sonrisas,
sumamos deudas
y ganamos el respeto del que vota silenciado.
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El cuerdo precisa revuelo.
Tongada antes su vida
-menudos de gangrena anacarada-
se desincrustó la taracea
cuerda, normal y ordenada.´
De cuerdo a héroe se avino
De héroe a Zeus divino.
Convulsa su inteligencia
asió la azagaya
“aginando” a los histriones
¡Divertida compaña!
Deseó el desuso del rompenecios
Deseó exequias de polacadas
Perpetró azogado en revueltas
Palpitó la pena en el alma.
El mundo cuerdo enloquece,
empobrece y se desiguala.
Son razones que asientan fines.
¡Hasta el confín se avalan!
Ahora vanea aruñando escollos.
Purga en el lazareto.
Locuelo hecho reo.
¡Batucada a su respeto!
Sin ellos se extingue la vanguardia
Sin osados perdura la mendicación
Divergente delirio
¿Estás allí inspiración?
El cuerdo precisa revuelo.
Al saciarse de utopía se torna locuelo.
¡De cuerdo a héroe se avino!
¡De héroe a Zeus divino!
con mucho respeto, crítico a los políticos
En el tono armónico de gargantas habladoras,
gastadas por el uso y la ingesta de dolores
se revientan venillas que aniquilan.
Enérgicas ruecas de bienaventuranzas se extinguen;
se gesta la desilusión de la impetuosa juventud;
se memora la impotencia de hechos;
se gesta el rendimiento por madurez;
Se memora la rendición con gestos.
Arrebatadas a los graves problemas,
agudas disfonías encrestan a oradores de oficio.
Fervorosos por convencer
dominan su febrícula engrasando discursos avinagrados.
En el tono armónico de gargantas habladoras,
bienaventuranzas se extinguen.
Se colorean las mejillas de sus almas,
Se disimulan sus lágrimas.
En las gargantas gastadas
por la ingesta de la impotencia
se instrumentan voces:
unas aprovechadas,
otras naturales
y muchas digitalizadas.
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