Me hace falta liquidez, dinerito.
Unos socios, no amigos,
-repito-,
unos socios amablemente quieren prestarme capital.
Quieren que me endeude.
Quieren que mi desgracia pueda negociarse.
Quieren que mi deuda se convierta en bonos.
Quieren que mis bonos pasen a un mercado sin control.
No puedo aceptarlo.
No puedo aunque lo necesite.
Miro a mi horizonte y en él, nítido aparecen los demonios,
Son engreídos que especulan en bolsa.
Juegan en sus despachos con nuestras vidas.
¿A qué están jugando?
¿Qué están tomando, raros fármacos?
¿Qué están haciendo?
¿Se están riendo a costa de las Democracias de los Estados?
Estos demonios engreídos forman un club –llámese élite- de ultraderechistas peligrosos.
¿Por qué nadie los para?
Sí, son ultraderechistas ya que exterminan a personas y países propiciando la pobreza.
No somos miembros de su club, clase o élite.
No les importamos.
Lo hacen porque pueden.
Sí, son peligrosos porque especulan hasta arrebatarnos las posibilidades de pan, de salud, de vida.
Esto no es serio.
Nos echan a pelear y se ríen.
Nos quitan hasta el agua y se ríen.
Esto no es serio.
Unos socios –que no amigos- quieren prestarme capital para que mi desgracia cotice en bolsa.
No puedo aceptarlo, no, y lo necesito.
¡Claro que necesito ayuda!
Necesito mucha ayuda.
Tengo compromisos que me duele no cumplirlos.
Compromisos con los enfermos, con los muy trabajados y ancianos, con los niños, con los desfavorecidos…
¡No puedo ni debo abandonarlos!
Unos socios –que no amigos- quieren prestarme capital para que mi desgracia cotice en bolsa.
No puedo aceptarlo, no, y lo necesito.
Miro a mi horizonte y en él , nítido aparecen los demonios.
Demonios que no permiten que los controlen.
Que no toleran que los rectifiquen.
Que no admiten fiscalización.
Ellos son demonios ultraderechistas que juegan en el tablero de nuestro planeta a debilitar las democracias y sus economías.
¡Maldito jueguecito con el que se divierten!
Mientras el resto sea cada vez más pobre, ellos están enriqueciéndose. Les conviene.
No entiendo porqué no se les pone freno.
HAGÁMOSLO.
Sí, me hace falta liquidez.
Quiero dinero para cumplir mis promesas.
Promesas heredadas, bondades, conquistas sociales.
Promesas que "años a" se obtuvieron con dolor, lucha, sangre y muerte.
Promesas de SOLIDARIDAD para con enfermos, niños y ancianos.
Promesas de AMOR al desear un mundo mejor.
NECESITO DINERO, ASÍ ESTÁ LA COSA.
LO QUIERO Y LO ACEPTARÍA SI MIS SOCIOS –QUE NO AMIGOS- LES PUSIERAN NORMAS A LOS INTOCABLES E INTANGIBLES SISTEMAS DE ESPECULACIÓN EN LA BOLSA.